JUGADOR DESCONOCIDO: Marko Marin

Por Reimon (@reimon7).

     21 años, 1.70 de estatura y un físico endeble que parece el de un adolescente son las cartas de presentación de Marko Marin. ¿Cómo es que alguien así ha logrado llegar al mundial de Sudáfrica con los poderosos alemanes? ¿Porqué un jovencito sin musculatura pudo llevar a su equipo a la fase de grupos de la Champions League? La respuesta es sencilla: Marko no necesita músculos, no necesita altura, ni siquiera necesita de un físico privilegiado, todo eso lo reemplaza con talento puro.

Aún recuerdo la primera vez que me fijé en el joven extremo nacido en la vieja Yugoslavia pero naturalizado alemán. Fue en una ocasión que me puse a ver la previa de un amistoso que la Alemania de Löw disputaría con miras a la Eurocopa. Al ver la convocatoria, me sorprendió ver a un jugador del Borussia Mönchengladbach, que en ese momento estaba disputando la segunda división alemana. Me sorprendí aún más cuando vi que este jugador sólo contaba con 18 años.

Comencé a seguirlo y no fui el único, sus grandes actuaciones con el Gladbach, redondeadas con 8 goles y numerosas asistencias le dieron el nombre del “el Messi alemán” en la prensa local, y equipos de mayor envergadura comenzaron a fijarse en él. Era obvio que el habilidoso diestro (que a pesar de eso se desempeña por izquierda) no duraría mucho en su modesto club.

Finalmente fue el Werder Bremen el afortunado que consiguió llevarse a la joven promesa a cambio de 8.5 millones de euros (una cantidad bastante grande para un equipo como el Borussia). En el 2009, Marko comenzó su primera temporada con el equipo del Weserstadion y rápidamente se dio a notar, formando una fresca dupla con Mesut Özil, que los llevaría a los primeros puestos de la Bundesliga.

Con el buen desempeño vinieron las convocatorias. Luego de pasar por todas las categorías inferiores de Alemania (que le ganó la partida a su natal Bosnia), las oportunidades en la selección mayor llegaron y Marko anotó su primer gol con la casaca blanca apenas en su segundo juego. Luego llegó el verano del 2010 y Joachim Löw anunció que Marin estaba en su lista provisional para la Copa del Mundo.

Decidido a no volver a sufrir una decepción (en el 2008 fue cortado de la lista para la Euro), el joven extremo impresionó a propios y extraños en los partidos amistosos y se quedó con uno de los 23 puestos para la máxima competición. Ahí su juventud le pasó factura, pero el mal paso en Sudáfrica no lo frenó.

Ahora ya tiene a su equipo en la Champions (en el grupo más difícil), y sus asistencias serán vitales para seguir avanzando. Ya sea de mediapunta o de extremo, será un talento imperdible en la mayor justa a nivel de clubes, desde ahora les recomiendo todos los partidos del Werder Bremen.