El "nuevo" Bicentenario 2010

Por Reimon.

El torneo del futbol mexicano, que recién acaba de comenzar, tiene ciertas novedades, como el nombre (¿cómo se llamará el del siguiente semestre?), y el hecho de que los seleccionados mexicanos se irán a la selección varias fechas antes de que concluya la campaña. Pero fuera de eso, la verdad es que todo será lo mismo, por lo que me puse a pensar en cómo se podría mejorar el futbol mexicano, con planes que no fueran a largo plazo, sino (relativamente) fáciles de aplicar. De todas las ideas que se me ocurrieron, destaco cinco, que a mi parecer son las más importantes y concretas.

• Torneos largos: Creo que es necesario regresar al formato de torneos largos, resultando en ligas de un año (como se hace en la mayoría de los torneos de Europa), ya que de esta manera la planificación de los equipos será mucho más efectiva, evitando además que los técnicos duren tan poco en el cargo, fomentando la continuidad y haciendo así que el tan famoso puntísmo no sea tan común, pues jugando a empatar no se ganaría un torneo así. Además, soy de los que se inclinan por un campeón por puntos, no descarto una liguilla, aunque eso sí, creo que deberían pasar los mejores ocho y olvidar los grupos.

• Multipropiedad: El hecho de que una misma persona/empresa sea dueña de más de un equipo es un hecho que avergüenza a todo el futbol mexicano. Es un asunto del que ya hemos hablado, y si de verdad queremos estar a la vanguardia, codearnos con la élite, este es uno de los primeros pasos que deben darse, ya que las reglas de la FIFA simplemente son ignoradas, propiciando un ambiente de sospechosismo y desconfianza.

• Pacto de caballeros: Es otro de los asuntos en los que el reglamento se deja completamente de lado. Y aquí el problema no sólo es que al prevalecer los intereses económicos sobre los deportivos se ignora a la FIFA, sino que las carreras de los jugadores se estancan, o incluso se acaban. Reinaldo Navia es la más reciente víctima de este pacto de “caballeros” que gracias a las ambiciones económicas del América, no pudo enrolarse con los tiburones rojos del Veracruz. Otro de los casos más sonados fue Antonio De Nigris, que en paz descanse, quien nunca pudo regresar a México a pesar de tener ofertas, todo porque Monterrey, ese equipo que tanto lo homenajeó tras su muerte, simplemente no se lo permitió, convirtiéndolo en un exiliado.

• Eliminar el ordenador: La comisión de árbitros sabe que ya ninguno de nosotros nos creemos el cuento del famoso ordenador. Es claro que no existe, los equipos simplemente eligen al árbitro que desean, lo que provoca un caos completo. Es necesario desaparecer el sistema y establecer uno nuevo, que provea más claridad y orden. Además, en la misma línea de los árbitros, es una necesidad crear nuevas reformas, como disminuir el número de colegiales en cada categoría (no hay suficientes con el nivel requerido), así como mejorar el sistema de capacitación.

• Roce internacional: Es un factor que no sólo debe continuar, sino fomentarse, ya sea en la Libertadores, Concachampions, amistosos o torneos internacionales (como la Peace Cup o el Mundialito). Ésta es la única manera de acercarnos al futbol de otros países, pues en este momento nos encontramos a años luz de ellos. Codearnos con la élite no nos hará un futbol primermundista de la noche a la mañana, pero es claro que ayuda.

Es obvio que estas ideas no son las únicas necesarias para mejorar nuestro futbol, pero es un muy buen comienzo. Ahora el problema es aplicarlas. La afición y los analistas lo saben, lo malo es que los “dueños del balón”, cegados por el dinero, son (hasta ahora) incapaces de darse cuenta.